Jesús es el Señor de nuestras finanzas

El nombre que mejor describe a Dios en el área financiera  es  “Señor”.

ü S i El es Señor de tus finanzas, El debe determinar nuestra forma de vivir (por su Palabra).

Ejemplo 1: Job perdió todo lo que poseía (hijos, dinero, posesiones materiales) y aun así fue capaz de adorar a Dios. El conocía al Señor y conocía el papel del Señor como dueño de todas sus posesiones.

Ejemplo 2: ¿Por qué prefirió Moisés sufrir con los Israelitas, abandonando todas las riquezas que tenía en Egipto? Porque él conocía al Señor, dueño de todas las cosas. 

Hay 3 facetas de Dios en el área de los recursos materiales: 1.  Dueño  2. Tiene el control 3. Dios es el Proveedor.

A.  Dueño – El es el dueño de todas nuestras posesiones.

ü ¹⁴ He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y los cielos de los cielos, la tierra, y todas las cosas que hay en ella. Deuteronomio 10:14                                                                                                      De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan. Salmo 24:1                     …La tierra es mía. Levítico 25:23b                                                                                                          Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos. Hageo 2:8    

                                     

ü El es el creador de todas las cosas y nunca ha transferido la propiedad de su creación al hombre.     Cuando usted reconozca el dominio de Dios sobre todas las cosas, entonces podrá permitir a Jesús ser el dueño y Señor de su dinero y propiedades. Usted debe entregarle a Dios el control de sus bienes si quiere ser cristiano.   Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo. Lucas 14:33

Debemos renunciar al derecho de propiedad de todas nuestras posesiones. El Señor a veces nos prueba pidiéndonos que renunciemos a aquello que es la posesión más valiosa para nosotros.

 

Ejemplo de Abraham:    “Toma a tu hijo, tu único hijo —sí, a Isaac, a quien tanto amas— y vete a la tierra de Moriah. Allí lo sacrificarás como ofrenda quemada sobre uno de los montes, uno que yo te mostraré.” Génesis 22:2 (Nueva Traducción Viviente)

Cuando Dios vio la disposición de Abraham a darle lo más preciado, lo bendijo más allá de sus promesas iniciales. Lo prospero en todas las áreas de su vida incluso la económica. Leer Génesis 22:16-18.

Cuando reconocemos que Dios es el dueño de todo, cada decisión que efectuamos viene a ser una decisión espiritual. Ahora decimos “¿Señor que quieres que haga con tu dinero?”

Al manejar el dinero de esta forma, orando de acuerdo a Su voluntad, cada decisión de de gastar y ahorrar se convierte en algo tan espiritual como el ofrendar.

El hecho de reconocer que Dios es dueño de todo, también influye en la forma en que cuidamos las posesiones. Porque Él es el dueño de la casa en que vivimos, debemos cuidarla y tenerla limpia y bien mantenida.

Decir que Dios es el dueño de todo es fácil. Vivir como si Dios es dueño de todo es el reto. Esto es mente de Reino. Todo lo que hemos aprendido se opone a este principio bíblico.

El mundo nos dice que somos los dueños de todo lo que poseemos. Aun nos dice que somos dueños de la casa de la cual debemos 27 anos de pagos. 

Solo cambiando nuestra mentalidad totalmente lo podemos lograr. (Romanos 12:2)

a.     Medite en 1 Crónicas 29:11-12 cada día por 30 días.

b.     Empiece a hablar en términos de suyo, de El o del Señor, en vez de mío o nuestro.

c.      Ore por que Dios le ayude a cambiar su mente..

d.     Ore antes de comprar algo y cuando lo adquiera, recuerde que es del Señor.

*Material de Crown Financial Ministries fue usado en parte.